El Cannabidiol o CBD, presente tanto en algunas variedades de la planta de cannabis como en el cáñamo industrial, es un cannabinoide con interesantes propiedades que además no produce efecto psicotrópico alguno. Hoy en día puede encontrarse de muchas formas, desde aceites y cápsulas hasta las flores de cannabis. Por supuesto, ninguno de estos productos contiene THC, el principal componente psicoactivo de la marihuana.
Las extracciones de resina con CBD son un proceso especializado que permite separar los compuestos activos del cannabis de manera eficiente. Al eliminar la materia vegetal no deseada, se obtiene una resina rica en cannabidiol (CBD) y otros cannabinoides beneficiosos, que posteriormente puede añadirse a distintos tipos de productos.
Dentro de esta categoría podrás encontrar varios tipos de concentrados ricos en este cannabinoide, desde resinas de origen suizo a pastas de CBD o, directamente, cristales de CBD aislado, con una pureza del 99%.
Dentro de las resinas tienes varias opciones, tanto en términos de aromas como de contenido en CBD; por ejemplo, el hachís Nepal Cream, el Amnesia Hash CBD o el Hash Wedding Cake oscilan entre el 15 y el 20% de CBD, mientras que Caramel Rif, que es un hachís cribado en seco contiene algo más, sobre un 25%, una cantidad similar a la del Hachís Strawberry o el Super Pollen, que llega al 30%.
Si te interesan concentraciones mayores, el Charas 50 es una resina trabajada a mano que alcanza un 47% de contenido de CBD, mientras que la resina Dry Sift, cribada en seco, alcanza una espectacular concentración cercana al 75%. Por supuesto, todas estas resinas están libres de pesticidas o productos químicos y son completamente legales al no sobrepasar el límite legal de THC.