En esta etiqueta puedes encontrar toda nuestra gama de fertilizantes minerales para el cultivo de marihuana. También conocidos como fertilizantes químicos o de base salina, estos productos están elaborados con materiales inorgánicos de origen total o parcialmente sintético. Estos productos se elaboran con materias primas procedentes del medio natural, como petroquímicas o minerales, pero se requiere un proceso químico para su transformación en fertilizante.
Los fertilizantes minerales tienen varias ventajas sobre los nutrientes orgánicos. Por un lado, contienen altas concentraciones de los macronutrientes básicos necesarios para el crecimiento de las plantas: nitrógeno, potasio y fósforo (NPK), junto con oligoelementos.
Estos elementos se presentan en forma directamente asimilable, sin necesidad de ser descompuestos por los microbios del suelo para ponerlos a disposición de las raíces de las plantas. También son altamente solubles y, como resultado, son rápidamente absorbidos por las plantas, lo que hace posible una dosificación precisa y un control eficaz de la planta. Esto implica alimentar los requisitos exactos de un cultivo en un momento dado de su desarrollo, lo que podría hacer un uso mucho más económico de los fertilizantes.
Su facilidad de uso, acción rápida, rentabilidad y formulación estandarizada han ayudado a que los fertilizantes minerales sean la elección de casi todas las instalaciones de cultivo de cannabis autorizadas a gran escala en todos los lugares donde el cultivo es legal y autorizado, sin embargo, no están exentos de desventajas, tanto en su uso y producción.
A nivel de cultivo, su carácter concentrado hace que la sobrefertilización sea un problema frecuente. Y las sales utilizadas en los fertilizantes minerales pueden acumularse rápidamente en el medio de cultivo si no se tiene cuidado. Estas acumulaciones de sal pueden causar alteraciones del pH y bloqueos de nutrientes, afectando seriamente el desarrollo de las plantas. Los fertilizantes minerales no contribuyen a mejorar la estructura del suelo o la fertilidad a largo plazo, y el uso excesivo puede dañar permanentemente las poblaciones microbianas del suelo, con el correspondiente efecto negativo en la salud de las plantas y la resistencia a las enfermedades.
A nivel ambiental, los fertilizantes minerales son el resultado de procesos químicos que consumen mucha energía o de operaciones mineras extractivas y, como tales, están lejos de ser sostenibles en términos de uso de energía y consumo de recursos finitos. A pesar de este impacto ambiental negativo, su comodidad de uso y su costo relativamente bajo significa que siguen siendo una opción popular entre los productores de todo el mundo.
Los fertilizantes minerales o químicos se pueden utilizar en todo tipo de sistemas de cultivo (aunque siempre recomendamos los fertilizantes orgánicos para obtener los mejores resultados en el cultivo del suelo) en particular, la jardinería hidropónica. Esta técnica de cultivo intensivo, en combinación con un uso inteligente de fertilizantes minerales, siempre dará como resultado las cosechas más productivas posibles.
Hay una amplia gama de diferentes marcas de alta calidad ofreciendo estos productos en forma de fertilizantes sólidos y líquidos para adaptarse a todas las situaciones y presupuestos. En Alchimiaweb ofrecemos fertilizantes minerales de uso general, estos formulados para plantas de cannabis autoflorecientes, así como nutrientes adaptados al período de crecimiento y floración de las plantas de cannabis fotoperiódicas.