Cómo ahorrar en consumo de electricidad en tu cultivo de marihuana
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Como seguro que sabrás si nos conoces, en Alchimia siempre hemos abogado por el autocultivo pues creemos, por varios motivos, que es la mejor decisión si eres usuario de cannabis. Sin duda, el principal es que es la única manera de conocer al 100% el producto que vas a consumir, ya que de las diferentes "alternativas" que ofrece el mercado negro no sueles tener conocimiento sobre las prácticas y productos que se han usado durante el cultivo, y muchas de ellas pueden ser altamente perjudiciales para tu salud.
Además, y si no es posible cultivar en exterior, con un pequeño indoor puedes cubrir tus necesidades de marihuana sin problema, aunque el gasto en electricidad puede resultar un problema. Bien, pues en este artículo veremos unos pocos consejos para reducir sustancialmente tu factura de la luz, pues pensamos que el autocultivo, además de ofrecerte cogollos de calidad y ser una terapia, debe ser también económico, por lo que vamos a darte unos breves consejos que puedes implementar de forma fácil en tu cultivo y ahorrar un buen dinero.
Cómo reducir la factura de la luz de tu cultivo interior
Escoger la mejor tarifa de luz
El primer paso, y uno de los más importantes, es conocer la potencia contratada en tu hogar y tu tarifa actual (puedes ver todo esto en la factura de la luz). Es primordial tener conocimiento de la potencia contratada y lo que consumen los elementos eléctricos que tienes en casa (nevera, lavadora, vitrocerámica...e indoor), pues en ocasiones la potencia puede estar sobredimensionada, elevando el coste fijo de la factura. En estos casos, reducir la potencia contratada repercutirá en un menor gasto fijo en cada factura, con el ahorro que esto conlleva. Por contra, y si es necesaria más potencia, deberás contratar una tarifa superior para evitarte problemas y posibles recargos por sobreconsumo.
La mejor solución una vez tengas claro el consumo de tus electrodomésticos más el de tu indoor (en KW) es sin duda llamar a tu empresa suministradora de electricidad e informarte de todos estos aspectos. Somos conscientes de que en ocasiones se necesitan varios títulos universitarios para entender algo de la factura, y una simple llamada es lo más cómodo y rápido para que las cosas te queden claras. Eso si consigues que te contesten, por supuesto.
Cuando sepas la potencia total que necesitas y el precio al que pagas el KW, puedes solicitar una mejora en el precio a tu compañía (por pedir no perderás nada) y también solicitar información a otras empresas de la competencia para decantarte por la más adecuada y económica a tu caso particular. Por ejemplo, en ocasiones existen diferentes tarifas según horarios de consumo como la tarifa nocturna, algo muy interesante ya que la luz de tu indoor probablemente se encienda por la noche (no indispensable), puesto que las temperaturas nocturnas suelen ser inferiores.
Este sería el primer punto, un buen trabajo de investigación para conseguir una tarifa de luz lo más económica posible para tu hogar en función de los KW que necesitas y también de tus horarios.
Cultivo
A día de hoy, la mayor eficiencia energética en cuanto a iluminación la proporcionan las lámparas LED. El sodio (HPS) emite gran cantidad de energía en forma de calor, por lo que se puede decir que un LED es aproximadamente un 30% más eficiente que un sodio y emite mayor cantidad de luz asimilable por las plantas con los mismos W de consumo. Se trata, pues, de un punto importante a tener en cuenta.
Además, debido a que los paneles LED desprenden menos calor que las tradicionales lámparas de sodio, necesitarás extractores de menor potencia para renovar el aire del cultivo, lo que se traduce en menor consumo. En muchos lugares, podreás tener encendido tu indoor incluso en verano y sin usar aire acondicionado, aunque tomando una serie de medidas como reducir la intensidad lumínica del LED si fuese necesario, o tener muy presente factores como el DPV y el fotoperiodo.
Con un pequeño armario de cultivo y una lámpara LED a partir de 240w, en la mayoría de casos es suficiente para irse autoabastecido de cogollos de estupenda calidad y sin un gran consumo energético.
Temperatura y humedad en el cultivo de marihuana
Temperatura y humedad relativa juegan un papel importantísimo en el cultivo interior de marihuana, pues de ellas depende gran parte de la actividad de la planta. Valores desajustados de estos dos parámetros darán con un coeficiente de DPV (Déficit de presión de vapor) inválido, lo que se traducirá en un pobre desarrollo. En este artículo os explicamos cómo ajustar correctamente estos valores para que nuestras plantas gocen del mejor clima para un desarrollo espectacular.
Genética y cultivo
Una lámpara LED dimmable (con potencia regulable) es de gran ayuda cuando pretendes disminuir el gasto energético, pues las plantas no tienen las mismas necesidades lumínicas en cada fase de cultivo. Así, puedes adaptar la intensidad de tu sistema de iluminación en cada momento del cultivo; un ejemplo sencillo es que una vez germinadas las semillas y durante sus primeros estadios, éstas no necesitan 600w, por lo que puedes reducir la intensidad a un 25% por ejemplo, e ir aumentando la potencia de la luz paulatinamente a medida que las plantas se van desarrollando y hasta la floración, para volver a disminuirla después del engorde de flor, ya que después de esta fase no necesitarán tanta potencia de luz (últimos 7-10 días de cultivo aproximadamente).
Una vez teniendo claro que un LED regulable en potencia ayuda y mucho a reducir tu consumo de luz, hablemos un poco sobre genéticas y técnicas de cultivo: indudablemente, partir de semillas feminizadas o esquejes permite no malgastar luz ni espacio de cultivo creciendo plantas que descartarás con el tiempo por ser machos, por lo que las semillas regulares en estos casos no son una buena opción, igual que las semillas automáticas aunque por otro motivo, como veremos más adelante.
Nuestro consejo es que te decidas por plantas de floración corta (de 45 a 60 días como máximo) y con gran vigor vegetativo, de manera que puedas proporcionarles el mínimo crecimiento posible (es en crecimiento donde más horas de luz se necesitan). Esto se consigue poniendo más plantas por metro de cultivo para reducir al máximo el tiempo de crecimiento, es decir, usando la famosa técnica SOG o Sea of Green.
Cultivo de marihuana en SOG (Sea of Green)
La técnica de cultivo de marihuana conocida como SOG o Sea of Green consiste en optimizar el espacio de cultivo y por tanto el rendimiento. Veremos todos los pasos que hay que seguir para conseguir un buen cultivo en SOG. Desde la planta madre a la selección de esquejes y el tamaño adecuado de las macetas segun el sustrato.
Por otro lado, la técnica SCROG es la peor decisión para ahorrar luz y tiempo, pues se necesitan varias semanas de crecimiento, incluso meses. Debes tener claro que el periodo vegetativo se suele realizar a 18/6, por lo que la mejor opción es la técnica SOG con un buen número de plantas por metro cuadrado para emplear el menor tiempo posible en su crecimiento. A grandes rasgos, el periodo vegetativo será inversamente proporcional al número de plantas que pongas en tu cultivo (más plantas significan menos tiempo de crecimiento). Recuerda que una vez pasan a floración las plantas pueden doblar o incluso triplicar su tamaño según su genética, algo muy útil si quieres recortar el tiempo de crecimiento.
Al contrario de lo que podrías pensar, una variedad sativa/índica o sativa podría ir mejor en cuanto a ahorro energético, pues necesita muy pocos días de crecimiento debido a su vigor y stretching (estiramiento al pasar a floración), por lo que podrían entrar en fase de floración en un SOG a los pocos días de germinar. Incluso puedes optar por variedades con mayor predominancia Sativa y ponerlas directamente a 12/12 después de su germinación, comportándose prácticamente como plantas autoflorecientes. Lo importante aquí es tener en cuenta la duración de la floración, ¡no vas a ahorrar mucho en luz si escoges una Sativa de 14 semanas de floración!
Uno de los mayores errores en este caso, como apuntábamos anteriormente, es cultivar autos en interior. Las semillas autoflorecientes necesitan un fotoperiodo de 18/6 desde la germinación hasta la cosecha para optimizar su producción (incluso 20/04), lo que significa un gran consumo de luz. Además, en determinadas épocas del año puede dificultar mantener la temperatura y humedad (DPV no óptimo) con tantas horas de luz encendida, y en ocasiones puede necesitar la instalación de un aire acondicionado o un sistema de extracción de aire más potente, incrementando el consumo de manera inevitable. Llegado el calor veraniego, puedes optar por disminuir la intensidad de las lámparas, como comentábamos, y jugar con el DPV añadiendo humidificadores en el cultivo, por ejemplo.
Intensidad de luz y fotoperiodo
Otro de los trucos que puedes utilizar es regular la potencia de tu equipo de iluminación, como veníamos mencionando, aumentando paulatinamente la intensidad de éste hasta el máximo (no necesario en muchos casos si usamos LED) una vez entrada la floración. Muchos cultivadores, antes de realizar el lavado de raíces, también bajan la intensidad de luz una vez finalizada la etapa de engorde, o incluso reducen las horas de luz hasta 10 una vez finaliza esta fase.
Otros cultivadores aplican fotoperiodos de luz de 14 horas (para crecer) una vez germinada la semilla, para poco después reducirlos a 12/12; existen multitud de opciones para jugar con el fotoperiodo de las plantas y que nos permiten ahorrar energía, eso sí, no todo irá a la misma velocidad que con los fotoperiodos standard.
Para el mantenimiento de plantas madre, normalmente se usa un fotoperiodo de 18/6, lo que viene siendo el standard de crecimiento. No obstante, hay quien usa 16/8, (es un ahorro dos horas de luz diarias), de manera que el crecimiento es algo más lento, pero en ocasiones es más que suficiente para guardar genéticas o para la obtención de los esquejes que necesitamos. Hemos de mencionar también que para un espacio de crecimiento vegetativo no son necesarios gran cantidad de W, con un panel LED de 100w es más que suficiente para mantener madres o hacer crecer un buen número de semillas o clones.
Cuando todos estos trucos se van utilizando simultáneamente y se tiene un buen planning de cultivo, verás cómo te permitirán ahorrar más de lo que imaginas en tu factura de electricidad a lo largo del año. ¡No dudes en compartir tus trucos con todos nosotros en la sección de comentarios!
¡Feliz cosecha!
