Entrevista a Estefania de Alchimia Grow Shop
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Hoy nos adentramos en el corazón de Alchimia Grow Shop de la mano de Estefania, su directora de operaciones, quien nos cuenta cómo se gestiona una de las tiendas de cultivo más influyentes de Europa. Desde la logística interna hasta la atención al cliente y la relación con proveedores, exploramos los engranajes que mantienen en marcha este gigante del sector.
Pero no solo hablaremos de números y estrategias: también profundizamos en la evolución de la industria y en el papel de la mujer en un mundo que, aunque tradicionalmente masculino, está viendo un cambio significativo. ¿Cómo ha sido su experiencia en un sector en constante transformación? ¿Cuáles son los mayores retos y satisfacciones de su trabajo?
Si alguna vez te has preguntado qué hace que un grow shop de referencia funcione como un reloj, esta entrevista tiene todas las respuestas. ¡Sigue leyendo!
Entrevista a Estefania de Alchimia Grow Shop
¿Cómo llegaste a Alchimia y cuál ha sido tu evolución dentro de la empresa?
Llegué a Alchimia en 2013, casi por casualidad, no conocía nada de la empresa ni del sector. En 2015 empecé a gestionar el departamento de Atención al Cliente y a partir de 2020 me puse al frente del equipo de Operaciones.
¿Cuáles son tus principales responsabilidades como directora de Operaciones en Alchimia?
Me encargo de los recursos materiales, personales y de la logística necesaria para que los clientes reciban lo que han comprado en nuestra web. Trato de gestionar las actividades diarias de la empresa.
En operaciones implementamos los objetivos estratégicos marcados; mejoramos y reformulamos procedimientos para optimizar el rendimiento de los equipos, y así, garantizar que funcionen de forma eficaz y eficiente.
¿Cómo es un día típico en tu trabajo? ¿Qué tareas requieren más atención en el día a día?
No hay días típicos en este trabajo. Eso es bueno y no tan bueno a la vez: bueno porque no hay espacio para la rutina (no te aburres)…no tan bueno porque nunca sabes lo que te depara la jornada. Operaciones son 6 equipos: 20 personas interactuando con otros equipos y otras tantas personas, con clientes y con proveedores en un sector muy particular. Aquí nada es típico y no hay dos días iguales.
Lo que más tiempo me ocupa suele ser la gestión de los imprevistos: de recursos humanos, materiales, errores, incidencias, averías...¡los imprevistos tienen mil caras!
¿Qué aspectos del funcionamiento interno de Alchimia consideras clave para su éxito?
La riqueza de Alchimia, su esencia y su identidad se basan en su capital humano. Es el motor que hace avanzar a la empresa.
El crecimiento personal y profesional de los trabajadores ha sido la base de nuestra evolución como equipo. En situaciones de crisis somos una piña, nos movilizamos para salir adelante, aunque las circunstancias sean complicadas.
En una empresa con tanta especialización, ¿qué procesos internos han sido más desafiantes de optimizar?
El desafío es constante. Siempre hay margen para mejorar y nos importa mucho seguir haciéndolo. Los procesos son vivos y cambiantes. Intentamos adaptarlos y hacerlos evolucionar constantemente, aunque sin duda, lo que más recursos y esfuerzo requiere es la digitalización: significa implementar materiales y recursos nuevos, pero también cambiar el chip y la forma de trabajar, y no es fácil.
Coordinar un equipo grande no es tarea fácil. ¿Cómo gestionas al equipo de trabajo en el día a día?
La clave está en tener un equipo empoderado, capaz de gestionarse y organizarse por sí mismo. Una cosa es un grupo de trabajadores y otra un equipo de trabajo. Ahí está la diferencia.
De base, esta forma de gestionar a la plantilla requiere mucho esfuerzo y dedicación, pero cuando los equipos tienen formación, herramientas, confianza en su trabajo y respeto por el trabajo de los demás, evolucionan a un ritmo muy dinámico. La ventaja es que formo parte de esos equipos, comparto diariamente tareas con mis compañeros y compañeras, lo que me permite entender perfectamente las necesidades.
¿Cómo manejas la comunicación interna para que todas las áreas trabajen de manera alineada?
Escuchando mucho e intentando comunicar de forma eficiente. La información tiene que ser clara y concisa y procuro trasladarla a todos por igual, con las mismas palabras y dando espacio al diálogo. Tiene que haber lugar para el debate, pero no para la interpretación. Los acuerdos a los que llegamos para definir procedimientos o para organizarnos se discuten, se debaten y se rebaten, pero una vez se han definido, los respetamos.
¿Qué habilidades consideras esenciales para liderar un equipo en una empresa como Alchimia?
No tengo claro si hay que ser valiente o atrevida, quizá ambas cosas.
En general es una dicotomía. Hay que desarrollar y aplicar habilidades opuestas: empatía y ecpatía; tolerancia y rigurosidad; flexibilidad y firmeza; escuchar activamente y dar mensajes claros, ser paciente pero muy reactiva…y no tener miedo a tomar decisiones. Es un aprendizaje continuo. Es importante defender y dar la cara por tu equipo, pero sin duda, lo principal es priorizar y fomentar el crecimiento personal. Un equipo empoderado, consciente de sus limitaciones y dispuesto a fomentar sus capacidades es imparable.
Tradicionalmente, la industria del cannabis ha estado dominada por hombres. ¿Cómo ha sido tu experiencia como mujer en este sector? ¿Te has encontrado con barreras o prejuicios?
Mi trabajo se encuadra en el sector de la logística. No abundan las mujeres. Barreras y prejuicios hay muchos. Si acudo a ver maquinaria y llevo conmigo a un operario, toda la atención y las explicaciones serán para él, aunque quien tome la decisión de hacer la inversión sea yo.
En Alchimia evitamos los estereotipos de género, pero nos queda camino por recorrer. La empresa no se escapa de los estereotipos laborales de género y tenemos que seguir cultivando igualdad. El 46% del equipo es femenino, pero una plantilla paritaria no garantiza la igualdad. Tengo 19 compañeras fantásticas y no hay dos perfiles iguales, imagina lo que nos enriquece esta diversidad. Ser una buena profesional no depende, en ningún caso, del género. Lo demostramos todos los días, porque, muy a nuestro pesar, hay que seguir demostrándolo.
Mujeres en Alchimia, cultivando igualdad
En el artículo de hoy hemos querido reflejar lo que ha significado el papel de la mujer en la historia y desarrollo de nuestra empresa, el trabajo que queda por hacer y reivindicar la necesidad de un papel más visible de la mujer en el sector cannábico.
Alchimia trabaja con muchos bancos de semillas y fabricantes. ¿Cómo es la relación con los proveedores?
Bueno, en catalán decimos: tants caps, tants barrets. Cada banco y cada fabricante o distribuidor trabaja a su manera y eso nos obliga a ser flexibles, muy flexibles. No siempre es fácil. Destinamos recursos considerables para suplir algunos procedimientos que -a mi entender- deberían aplicar los proveedores.
¿Cómo gestionan el stock para garantizar disponibilidad sin generar excedentes?
Intentamos mantener el inventario actualizado, para que los compañeros del departamento de Compras mantengan el equilibrio entre el stock disponible en almacén, las ventas y las reposiciones. Procuramos tener el material bien inventariado, en buenas condiciones y actualizar la información para que ellos puedan hacer las previsiones.
¿Qué retos surgen en la logística y distribución de productos en un sector como este?
La distribución es una parte esencial de la cadena de suministro. En este sector es, a la vez, un desafío debido a la diversidad legal entre las regiones con las que trabajamos. La logística debe ser meticulosa y rigurosa para garantizar la entrega correcta, la calidad y seguridad de los productos, en un plazo razonable y respetando las normativas vigentes. Malabares.
Alchimia es un referente en Europa. ¿Cuáles dirías que han sido los factores clave para su crecimiento?
A mi parecer, los factores clave son los mismos para cualquier empresa: innovar, explorar nuevos mercados, ser riguroso con la gestión financiera, interesarse por nuevos productos, no perder de vista a la competencia, captar talento… los mismos, solo que el sector en el que nos enmarcamos requiere un sobre esfuerzo: demostrar continuamente que hacemos las cosas bien, justificarse hasta el aburrimiento para conseguir sistemas de pago o financiación, etc., y, por supuesto, intentar superar los clichés (¡que no son pocos!).
¿Cómo ha cambiado la empresa desde que comenzaste a trabajar en ella?
A nivel técnico hemos avanzado, mejorando y automatizando procedimientos y tareas; a nivel humano hemos crecido y hemos aprendido mucho, a nivel personal y profesional. Lo que espero que nunca cambie es ese plus que tiene Alchimia, ese vínculo emocional. El sentimiento de pertenecer a una empresa donde las personas importan, donde los valores se comparten, donde las ideas se discuten y los éxitos se celebran. Fue lo que me conquistó cuando llegué, y espero que tomemos el camino que tomemos, no se pierda.
¿Qué estrategias utilizan para mantenerse competitivos en un mercado en constante evolución?
Intentamos potenciar nuestros rasgos diferenciales y nuestros puntos fuertes, a la vez que procuramos minimizar el impacto de nuestras debilidades.
Alchimia no solo vende productos, vende servicio de calidad. La excelencia de este servicio nos diferencia de los demás… y 24 años dan para aprender mucho. No repetir errores pasados ya es una ventaja. Nuestra competitividad la determina nuestra capacidad de adaptarnos a los cambios, de asumir nuevos conocimientos y dotarnos del talento necesario para evolucionar al ritmo del consumidor.
¿Cuál crees que es el mayor desafío que enfrenta Alchimia actualmente?
Pienso que tenemos más de un desafío por enfrentar: la incertidumbre acerca del futuro; el cambio: esa sensación de que el cambio constante es la nueva normalidad a la que hay que adaptarse; mantener nuestra reputación, conservar nuestros estándares de calidad; evolucionar tecnológicamente; y -sobre todo- amoldarnos a las normas, leyes y regulaciones que también están en cambio constante.
Mirando al futuro, ¿qué novedades o mejoras podemos esperar de Alchimia en los próximos años?
No sé qué nos depara el futuro, pero espero que nuestro objetivo sea seguir avanzando, evolucionar y crecer sin renunciar a nuestros valores, sin perder nuestra esencia y sin olvidar nuestra identidad.
Para finalizar, ¿qué mensaje te gustaría compartir con quienes ven en Alchimia no solo una tienda, sino un referente dentro del mundo del cultivo?
Que nos esforzaremos por seguir siendo ese referente, siendo fieles a nuestros valores para defender el uso personal y responsable del cánnabis, sin juzgar, sin prejuicios, basándonos en un sincero respeto por la libertad individual, como hemos hecho siempre.
Ha sido un placer charlar con Estefania y descubrir cómo se mueve el engranaje interno de Alchimia Grow Shop, una de las tiendas más influyentes del sector. Su visión sobre la gestión, el liderazgo y el papel de la mujer en la industria nos deja claro que el mundo del cannabis sigue evolucionando, y lo hace gracias a profesionales como ella.
¡Gracias, Estefania, por compartir tu experiencia con nosotros!
