Avances en dabbing: cold-start, quick-start y más

A medida que el mundo de los concentrados de cannabis evoluciona, también lo hacen los métodos de consumo usados para disfrutar de este tipo de extractos. El principio básico de vaporizar el extracto e inhalarlo a través de una pipa de agua o bubbler de borosilicato sigue más vigente que nunca, aunque en general sí se ha observado una reducción en el tamaño de éstos en los últimos años. Donde sí encontramos grandes cambios es en la superficie donde se vaporiza el extracto; en pocos años hemos pasado de rudimentarias skillet de titanio a clavos de borosilicato o titanio con o sin cúpula, hasta llegar a los modernos bangers de cuarzo. Incluso éstos han evolucionado durante los últimos años, siendo los bangers planos los más utilizados hoy en día.
En el momento de escribir este artículo, el cuarzo sigue estando considerado como el mejor material para el dabbing, principalmente por la pureza de sabor que ofrece, así como por su resistencia a las altas temperaturas (es bastante más resistente a los shocks térmicos que el borosilicato). Además, es relativamente barato de fabricar, por lo que podemos encontrar desde bangers baratos hechos en China hasta auténticas piezas de coleccionismo manufacturadas a partir de cuarzo alemán o americano.