Historia de la prohibición del cannabis
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Como hemos visto anteriormente en artículos como el de la historia del cultivo de cannabis, la relación entre el ser humano y esta planta data de milenios atrás. Desde entonces, esta relación se ha caracterizado por el aprovechamiento de las diversas facetas que presenta el uso del cannabis, desde la vertiente social o recreativa hasta la medicinal, pasando por la téxtil o industrial y la religiosa o espiritual.
No obstante, esta relación también se ha caracterizado, desde tiempos remotos, por el afán de algunos de prohibir su uso, muchas veces como simple herramienta para aumentar el control de las clases dirigentes sobre otras clases menos favorecidas. Hoy os invitamos a profundizar en la historia de la prohibición del cannabis y conocer con más detalle cómo llegó a establecerse a nivel - prácticamente - global durante el siglo XX.
Antecedentes históricos de la Prohibición del cannabis
Probablemente, y aunque no hayamos encontrado prueba escrita alguna que nos ayude a confirmarlo, los primeros encontronazos de la planta de cannabis con la autoridad se dieron en la antigua China. Es aceptado por muchos historiadores que el pueblo chino fue el primero en domesticar y cultivar el cannabis de manera controlada; asimismo, los primeros testimonios de las propiedades psicoactivas de esta planta provienen también de China. Siendo así, y teniendo en cuenta que el Taoísmo (que irrumpió alrededor del siglo IV A.C.) no promueve precisamente el uso de sustancias de este tipo, no resulta extraño que el cannabis arrastre cierto estigma en esta sociedad, también porque a menudo se lo asocia al opio y a su oscura historia en este territorio.
Para encontrar la que seguramente sea la primera prueba escrita de prohibición del uso de cannabis tenemos que viajar varios siglos adelante y hacia tierras musulmanas. Desde el inicio del Islam (s. VII) y hasta el siglo XIV, la planta de cannabis primero y más tarde extracciones de resina como el hachís (la primera mención a esta sustancia la encontramos en el s. X) convivieron con la sociedad sin mayores problemas. No obstante, las prácticas y expansión de los monjes sufís cada vez molestaban más a otras escuelas más ortodoxas del Islam, que trataban de asociar el uso de esta planta a actos violentos y otros comportamientos indeseables.
De esta forma, y en 1378, Soudoun Sheikouni (Emir de Joneima en Arabia) prohibió el uso del cannabis a lo largo y ancho de su territorio, convirtiéndose en la primera prohibición de esta planta de la que tenemos registro. Poco más de un siglo más tarde, en Europa las cosas no pintaban mucho mejor; en 1484, entraba en vigor una bula papal de Inocencio VIII en la que se prohibía el uso de plantas psicoactivas, que relacionaban directamente con la práctica de la brujería.
La legalidad del cannabis en el s. XIX
Durante el periodo entre 1800 y 1900 el cannabis empezó a ser perseguido en numerosos lugares por todo el mundo; Napoleón, preocupado por el creciente consumo de hachís que observó entre sus tropas al volver de la campaña de Egipto, prohibió su venta y uso en todos sus territorios. El imperio británico también lo prohibió en muchas de sus colonias, como Mauricio, la Guayana británica, Sri Lanka o Natal (hoy Sudáfrica).
Asimismo, durante la década de 1870 también se prohibió en lugares como Singapur o Egipto, donde se destruyó todo el hachís que pudo encontrarse y se impidió su importación. Unos pocos años más tarde, sobre 1890, el Sultán de Marruecos Hassan I básicamente prohibió su cultivo en todo el territorio menos en las zonas de las tribus del Rif, mientras que Grecia se unía al veto al cultivo, importación y uso del cannabis.
Como vemos, y desde determinados sectores, durante este siglo empezaba a verse cierta incomodidad respecto a la planta, que no hizo más que servir de preludio para lo que tenía que venir durante el siguiente siglo. Si bien el cannabis formaba parte de la mayoría de farmacopeas europeas durante el S. XIX, no es menos cierto que a finales de este siglo se hicieran varios descubrimientos que lo desplazaron a un posición secundaria en el terreno medicinal, como el desarrollo de la aspirina o ciertos barbitúricos.
Cannabis en el s. XX, la Prohibición gana terreno
Para explicar la evolución en el estatus legal del cannabis durante este siglo es necesario que nos fijemos en el fenómeno migratorio desde México hacia los Estados Unidos que se produjo durante las primeras décadas del siglo, especialmente tras la Revolución Mexicana (1910-1917). De hecho, entre 1914 y 1925 nada menos que 26 Estados de los EEUU aprobaron leyes prohibiendo la planta; se necesitaba una excusa para poder registrar, detener y deportar a los inmigrantes mexicanos, que no fue otra que la marihuana. Así, suele hablarse de la demonización de la planta de cannabis como mecanismo para la demonización de los inmigrantes mexicanos, que llegaban a los EEUU en un número cada vez mayor. Y si de paso podían demonizar también a los negros, pues mejor que mejor.
Es durante este periodo cuando entra en escena uno de los más burdos personajes de la historia de la prohibición, William Randolph Hearst. Magnate de la comunicación, Hearst dedicó todos sus esfuerzos y medios - que no eran pocos - a difundir mentiras sobre el cannabis, aunque en sus publicaciones lo llamaban siempre "marijuana" para que el público no lo relacionara con la planta que ya conocían desde mucho tiempo atrás. Su nauseabunda propaganda surtió efecto, con un número cada vez mayor de ciudadanos que demonizaban a la planta y, por supuesto, a sus consumidores. Según sus publicaciones, estaba claro que toda depravación (especialmente de negros y mexicanos) tenía su origen en el consumo de cannabis, y las noticias que relacionaban tragedias con la planta solían ocupar las portadas de sus periódicos.
Entre 1930 y 1934, el director del Buró Federal de Narcóticos, Harry J. Anslinger, se dedicó a reunir evidencias contra el cannabis, muchas de ellas provenientes de dudosas fuentes de información como las de William Randolph Hearst, su socio en la tarea de demonizar a la planta y a sus usuarios. De hecho, ya desde la Convención de Ginebra de 1925, muchos de los Estados participantes habían empezado a aprobar leyes para su restricción; la tarea de estos personajes no era otra que lograr una prohibición total y global. La Asociación Médica Americana no tardó en publicar un informe desmintiendo las mentiras de Anslinger y compañía, aunque como veremos a continuación no sirvió de gran cosa.
En efecto, en 1936 se estrenaron dos impactantes películas - llenas de falsedades e incoherencias - contra el cannabis, "Marihuana" de Dwain Esper y la famosa "Reefer Madness" de Louis Gasnier, ésta última como parte de una campaña ideada por Anslinger y su Buró de Narcóticos. Toda esta propaganda lanzada desde los medios audiovisuales, junto a otros factores que ahora comentaremos, derivó en la prohibición del cannabis en los EEUU para cualquier fin en Agosto de 1937, cuando Anslinger presentó en el Congreso el Acta de Impuestos a la Marihuana, que fue aprobada sin ningún tipo de debate y que provocó la clasificación del cannabis junto a otras drogas como la cocaína o la heroína.
Durante décadas, se consiguió relacionar crimen con inmigración y consumo de marihuana
Factores que influyeron en la prohibición del cannabis
Hemos visto ya varios factores que influyeron de manera considerable en la prohibición de la marihuana en los EEUU; por un lado, el aumento de inmigración desde México, que molestaba a los sectores más racistas de la nación. Por otro, las campañas desde medios de comunicación y organismos oficiales como las de Hearst o Anslinger. Finalmente, hemos visto también como ciertos descubrimientos en el campo medicinal relegaron al cannabis a un segundo plano, y no es una sorpresa que el sector farmacéutico promueva aquellas sustancias que más beneficios le reportan mientras "olvida" otras. Sin embargo, existen muchos otros factores que llevaron a la aprobación de la prohibición en 1937.
Uno de ellos es, sin duda, el hecho de que en 1933 finalizara la prohibición de las bebidas alcohólicas, la llamada "ley seca". Durante el periodo en que ésta estuvo vigente, los cuerpos policiales habían aumentado considerablemente su plantilla para hacer frente a las mafias que traficaban con alcohol, y se sospechaba que muchos terminarían llenando las colas de la beneficencia tras volver éste a su estatus legal. Sencillamente, se necesitaba prohibir algo con el fin de mantener todos esos puestos de trabajo.
Paralelamente, y ya en el sector industrial, la indústria petroquímica trabajó para eliminar el cáñamo como materia prima; por ejemplo, la compañía americana Du Pont había patentado un nuevo tratamiento químico para el procesado de la pulpa de madera, de manera que se sustituyó al cáñamo por ésta en la fabricación de papel. ¡Resulta paradójico que un país cuya Constitución estaba escrita sobre papel de cáñamo ahora intentara demonizarlo, prohibirlo y desplazarlo a toda costa!
Todo ello desenvocó en la prohibición de 1937 y en que el cannabis fuera retirado de todas las farmacopeas del país, y se sublimó en la prohibición a nivel mundial conseguida en 1961 durante la Convención Única de Drogas de las Naciones Unidas. Este organismo tenía un informe de la Organización Mundial de la Salud (si, la famosa OMS) donde se afirmaba que no existía justificación alguna para considerar la idea del cannabis medicinal, por lo que se decidió erradicar su uso a nivel global en los siguientes 25 años. Sobra decirlo, su fracaso fue, es y probablemente seguirá siendo rotundo.
Buenos humos!
Bibliografía consultada:
- Booth, M. (2015), Cannabis: A History
- Robert Clarke; Mark Merlin (1 September 2013), Cannabis: Evolution and Ethnobotany
- E.L. Abel (29 June 2013), Marihuana: The First Twelve Thousand Years
- Martin A. Lee (14 August 2012), Smoke Signals: A Social History of Marijuana - Medical, Recreational and Scientific
- Dave Bewley-Taylor, Tom Blickman, Martin Jelsma, The Rise and Decline of Cannabis Prohibition